La brisa primaveral, ver amanecer, la lluvia, la nieve, el sol, las estrellas, el café, el té, beber leche con chocolate antes de dormir, aprender, reír, cantar, tocar la guitarra, tocar el piano, chapurrear con la batería, la química, las matemáticas, la economía, hablar de una política inexistente, ella, pensar en todo lo que puede pasar de aquí a 30 años, agobiarme pensando en mi futuro, alzar la vista y mirar a las nubes, la fotografía, pensar en cuánta gente en el mundo hace algo, lanzar piedras al agua, esquiar, la velocidad, la montaña, escribir, correr en bici a toda velocidad, el inicio de la primavera, la primavera, el otoño, el verano y el invierno, la tecnología, sacar un 9,35 en FyQ, ayudar a los demás, hacer cosas que nadie más hace, criticar sin sentido, hablar de todo, leer, soñar, suspirar, hojear los calendarios, abrir cajones que hace años que no abro, las series de televisión, las cafeterías, los grupos locales, mi tierra, el norte, marearme pensando qué hay más allá del universo, buscarle explicaciones a los agujeros negros, las paridas varias con los amigos, mi calculadora (que ya hay que cambiar, por cierto, y eso que tiene dos años :P), mi mochila, gastar el boli rojo en una página del cuaderno de lengua, silbar en los pasillos, las funciones, los relojes de cuerda, los equipos de sonido valvulares, el agua, las duchas frías en verano, y calientes en invierno, y pensar sobre todo en cosas del futuro.
Ah, ¿A que son bonitos y felices? Arriba tenéis a Mr Bounce, mi favorito y abajo a Mr Happy.
